Elísabet Benavent (Valencia, 1984) es licenciada en Comunicación Audiovisual por la Universidad Cardenal Herrera CEU de Valencia y máster en Comunicación y Arte por la Universidad Complutense de Madrid. En la actualidad trabaja en el Departamento de Comunicación de una multinacional.
Su pasión es la escritura. La publicación en 2013 de sus novelas En los zapatos de Valeria, Valeria en el espejo, Valeria en blanco y negro y Valeria al desnudo se ha convertido en un éxito total de crítica y ventas con más de 120.000 ejemplares vendidos. Los derechos audiovisuales de la saga Valeria se han vendido para televisión.
En la actualidad se ocupa de la familia Coqueta y está inmersa en la escritura.
Título original: Alguien como tú
Saga: Segundo libro de la trilogía Mi elección
Saga: Segundo libro de la trilogía Mi elección
Categoría: Novela romántica erótica
Editorial: Suma de letras
Páginas: 440
Oficial site: Web
Este libro contiene la descripción de alguna escena de sexo, por lo que, estáis avisados.
Argumento:
Engánchate al fenómeno Alba. ¡Te vas a enamorar!
Alba se siente culpable. No sabe cómo actuar. Hugo y Nicolás se han volatizado y no puede imaginar su vida sin ellos. Alba se refugia en su estudio, no quiere ver a nadie. Alba empieza a beber para desconectar hasta que Hugo la libera de su culpa. Falta Nico para cerrar el círculo y que todo vuelva a ser como antes. Pero Nico es tozudo, Hugo duda y Alba no quiere tirar la toalla.
Después del éxito de las sagas Valeria y Silvia, con más de 100.000 ejemplares vendidos, Elísabet Benavent regresa con más fuerza que nunca para hablarte del amor en estado puro, de la atracción entre opuestos y de la necesidad de olvidar los prejuicios para simplemente amar. ¿Quieres seguir jugando?
Alguien como tú, la segunda entrega de Mi elección te hará arder en deseo...
Opinión personal:
El primer libro de esta trilogía, Alguien que no soy, me lo leí en menos de 24 horas. La historia me enganchó a más no poder y, a decir verdad, iba leyendolo esperando atrapar a una amiga que pacientemente me esperó para empezar el segundo libro juntas e así poder ir comentando sobre la marcha. Y así ha sido, quizás por eso este libro me ha durado un poco más, aunque no sea mucha la diferencia en verdad.
Engánchate al fenómeno Alba. ¡Te vas a enamorar!
Alba se siente culpable. No sabe cómo actuar. Hugo y Nicolás se han volatizado y no puede imaginar su vida sin ellos. Alba se refugia en su estudio, no quiere ver a nadie. Alba empieza a beber para desconectar hasta que Hugo la libera de su culpa. Falta Nico para cerrar el círculo y que todo vuelva a ser como antes. Pero Nico es tozudo, Hugo duda y Alba no quiere tirar la toalla.
Después del éxito de las sagas Valeria y Silvia, con más de 100.000 ejemplares vendidos, Elísabet Benavent regresa con más fuerza que nunca para hablarte del amor en estado puro, de la atracción entre opuestos y de la necesidad de olvidar los prejuicios para simplemente amar. ¿Quieres seguir jugando?
Alguien como tú, la segunda entrega de Mi elección te hará arder en deseo...
Opinión personal:
El primer libro de esta trilogía, Alguien que no soy, me lo leí en menos de 24 horas. La historia me enganchó a más no poder y, a decir verdad, iba leyendolo esperando atrapar a una amiga que pacientemente me esperó para empezar el segundo libro juntas e así poder ir comentando sobre la marcha. Y así ha sido, quizás por eso este libro me ha durado un poco más, aunque no sea mucha la diferencia en verdad.
Me pregunté si aquello que había experimentado con ellos me había hecho sentir especial o simplemente había descubierto que de algún modo lo era. Todos lo somos, ¿no? Es lo que nos diferencia, lo que hace que alguien nos adore pero otra persona nos aborrezca. Nuestra esencia, nuestro perfume natural, esa manera que tenemos de reírnos.
Si en el primer libro todo era sexo, descubrimiento, disfrute, placer... Este segundo libro es más de los sentimientos, de relaciones, de aceptación, de amor.
-Bueno, algo me dice que te lo pasarás mejor si funciona y consigo hacerle entrar en razón. ¿Cómo lo conseguí contigo? Quizás sea un buen punto de partida.-Yo soy un flojo. con castigarte un poco me bastó. Verte arrepentida... las faldas cortas, cuando te pintas los labios de rojo o preguntarme si te llegó aquella carta que mandamos...-Me llegó, ya te lo dije.- Tu silencio me inquieta.-¿Qué quieres que te diga sobre ello? Fue una bofetada verbal. Si la hubiera recibido un par de días antes habría corrido hasta aquí para sentarme en tu regazo, besarte y decirte que siento exactaemente lo mismo. Luego todo fue un poco más complicado.
El primer libro terminó dejándome nuy enganchada por lo que pasaba entre los tres y pese a que hubo momentos en que me reí muchisimo con los intentos de reconquista de Alba, creo que Nico se pasó mucho al enfadarse. Vale que tenía razón, que actuaron mal, pero no para llegar hasta ese punto. Y Alba tiene que quererlos muchísimo para llegar a ir tan detrás de ellos. Y sí, se hacen querer, se hacen amar, pero también ponen las cosas muy dificiles, en este caso Nico es quien puso más barreras tras lo que pasó, aunque estuviera deseando volver a estar con ella, tuvieron que pasar hasta por las flores, que al final no le llegaron.
<<Ojalá continúe lloviendo eternamente con nosotros echados en cualquier cama. No te elejes. Nosotros sabremos hacerlo bien. Te echo tanto de menos que me duele. Apenas puedo pensar en ello. es demasiado bueno para ser real pero... ¿por qué no podemos hacerlo real nosotros?>>
Pese a eso, cuando los tres vuelven a estar bien, me gusta la relación que se establece, por mucho que desde fuera ya pueda verse que no es algo para siempre, que es algo con fecha de caducidad, pero me parece una relación muy bonita donde los tres se complementan a la perfección. Porque los tres forman un todo. Y en este libro sobretodo Hugo vemos su transformación. Como deja que los sentimientos, esos que tenía tapados y que se negaba incluso a sentir, empiezan a fluir. Y menudas frases es capaz de soltar, menudas declaraciones de amor con todas las letras y en mayúsculas, porque realmente lo siente. Nico por su parte, tiene una forma diferente de expresarse, todavía tiene ese lado oscuro que no le permite terminar de soltarse, aunque lo desee, aunque quiera hacerlo pero.. aun no ha dado el paso y espero que en el siguiente lo haga y se abra del todo.
-Querías que te dijera algo que no sabes, ¿no? -empezó a decir con un hilo de voz inseguro-. Cuando esto contigo siento una presión aquí -se colocó una mano en el pecho- que se relaja cuando no estás, pero que no desaparece. A veces respiro hondo y me parece que hasta el aire huele a ti. Quizás tú ya sepas lo que es eso, pero a mí me ha costado mucho entender que me estoy enamorando de ti. Porque tienes algo que no había visto ni sentido jamás. Porque vuela a tu alrededor, en tu pelo, y me muero cuando te ríes. Pero me revives después. Y si todo el mundo le da tanta importancia a eso del amor será porque se parece a lo que yo estoy sintiendo ahora.
Por otro lado, en la reseña del primer libro dije que las amigas de Alba me habían caído muy bien, pues todo lo bien que me cayeron lo han perdido porque en este me parecen unas estupidas, sinceramente. La única que sigue gustándome y que se convierte en puro amor, es Eva, la hermana pequeña de Alba. Ella comprende la situación, conoce a Hugo y Nico y entiende porque Alba está ensmorado de ellos y ve que es algo recíproco. Además, Eva se lleva muy bien con Hugo, la relación de cuñados que se establece me parece entrañable, preciosa.
-¿Vas a dormir conmigo? -me pidió.-Dormiré con Eva.-¿Cómo quieres que me caiga bien así? -bromeó.
La verdad es que, no sé muy bien porque, pero hacia la mitad del libro, me dio por analizar las portadas y sus ositos y ahí es donde ya empecé a plantearme... ¿Quién es que se lo queds mirando desde fuera? ¿Cual de los dos va a desaparecer en el siguiente? Le di muchas vueltas a la cabeza, muchísimas y las conclusiones a las que llegaba nunca me gustaban. Y que poco me ha gustado tener razón en el final de este segundo libro.
<<Quiero que te hagas feliz.>> no era una promesa Disney de príncipes de cuento que velan por la felicidad de sus princesas. No era nada irreal. Era un deseo de carne y hueso, que me abrazaba con fuerza, que se preocupaba, viendo como yo me tambaleaba en una cuerda floja, entre hacer las cosas que quería y el miedo a no conseguirlas jamás.
Y es que, desde el primer momento que aparecieron me enamoró Hugo, tan sincero, tan directo, tan él. Nico me gustaba, pero hay algo en él que no termina de convencerme. Y en este libro se acrecenta este sentimiento. Y creo que el sumum de que me cayera mal fue el dichoso viaje a Tailandia. Estando en Nueva York, Hugo hace que Alba y él le vayan contando diariamente de su viaje, le llaman, le mandan fotos... Por el contrario, cuando Nico se la lleva, la distrae para que no llame a Hugo, le hace olvidarse de él, apartándole, dejándole de lado.
-No hay peros. -Le acarició la cara-. Te lo he dicho en más de una ocasión: aquí las palabras valen una mierda. ¿Qué valor podemos darle a un <te quiero> si no es ni la enésima parte de lo que sentimos? Es una manera de hacerlo saber. Un formulismo fácil de recordar. Es como todo lo que hay detrás de un beso. Nadie más que quien lo siente puede entenderlo, ¿verdad? Pues sintámoslo y que se acabe el mundo ahí fuera, Alba. Porque has nacido para completarnos.
Sé que con Hugo no puedo ser imparcial, porque me tiene loquita pero incluso con su forma más inexperta de hablar de sus sentimientos hace que estos te lleguen más profundos, porque son totalmente sinceros, y vienen directos del alma. Me recuerda un poco a un niño pequeño descubriendo por primera vez algo y no sabe describir o explicar lo que es, lo que le pasa. Hugo es como un niño pequeño, y aun así, sus palabras, sus gestos... Todo, hace que te llegue al corazón, que te enamore y sin duda, que llegado el momento, lo elijas a él. Así que espero que este tercer libro, que ya estoy deseando empezar tenga un bonito final tal y como lo tengo yo en mi mente. Y estoy segura de que Elisabet no me va a decepcionar.
Y con los años me convencí de que la vida era muchísimo mejor así. Y a mi alrededor construí un muro, al que puse ventanas para disimular. Sobre todo para hacerme creer que no me estaba perdiendo nada. Pero ella vino corriendo a prepararme un sándwich y hacerme compañía. Y yo la necesité al momento y supe. Solo supe. La vida no vale la pena si no es para compartirla.
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